viernes, 11 de octubre de 2019

Araceli Moretó: El peso del tiempo


LA VIEJITA ENCORVADA 

Una viejita encorvada 
 me habló de sus desventuras.
Mientras, el tren avanzaba: 
la noche era muy oscura,
y tras la oscura ventana, 
una débil luz de luna
tímidamente llegaba. 

La viejita me miraba. 
Eres joven, me decía
Yo estoy vieja y arrugada. 
Las arrugas de la vida,
han hecho mella en mi cara.
Por vivir no tengas prisa,
 que la vida, sola, ya avanza. 

Mira mi espalda encorvada 
y mis manos temblorosas.
Escucha mi voz medio ronca 
y mira mis piernas hinchadas. 
Mas no pierdo la esperanza 
de disfrutar cada hora 
que la vida me regala. 

Ya sé que la vida es corta. 
Que quizás mi tiempo acaba.
Observa el tren como avanza 
en medio de oscuras sombras,
mas la sombra es engañosa
 y no suele ser tan mala,
es un paso hacia la luz
 que llega cada mañana. 

 Así has de vivir la vida: 
sentirás desesperanzas.
Quizás te encuentres perdida
 o llores desconsolada.

Tras la tormenta, hija mía, 
siempre ha de llegar la calma.
Disfruta con alegría
 la vida mientras avanza
y no pierdas la esperanza 
de llegar a ser viejita.

Y la viejita encorvada..... 
al fin se quedó dormida 

 Mientras el tren avanzaba... 
observé como dormía. 

Araceli  Moretó




1 comentario:

Félix Maraña

  (Aunque ahora dan a luz, entonces las madres parían. Entonces, por 1953, las madres sólo tenían obligaciones y carecían de los derechos fu...