Poema donde se combinan métrica, orden alfabético y semántica.
Los poetas recitamos.
Los poetas componemos.
Los poetas sugerimos.
Los poetas, siempre, somos
del verbo, oficiantes sumos.
Al escribir, se abre un faro
que ilumina tu sendero.
Exhalas hondo suspiro
cuando encuentras tu tesoro:
“un poema noble y puro”.
Ante un público expectante,
no nos ponemos disfraz.
A quien nos viene de frente,
demostramos honradez.
En caso que alguien nos pinte,
que lo haga en la nariz.
Lanzamos, al horizonte,
la fuerza de nuestra voz
y, a quien, perdido, pregunte,
le irradiamos nuestra luz.
Cuando el escollo aparece,
un buen trovador mesura.
Cuando el poema amortece,
el autor, al fin, clausura.
Cuando el poeta florece,
versar, en dicha, procura.
Cuando el lirismo entristece,
la inspiración se satura.
Cuando el rapsoda merece,
la buena Musa le augura.
A pesar de la tristeza,
la poesía existe.
A pesar de la censura,
la poesía resiste.
A pesar de la pobreza,
la poesía subsiste.
A pesar de la incultura,
la poesía persiste.
A pesar de mi torpeza,
este poema leíste.
Luis Arranz Boal
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A. pesar de la tristeza, que nos causa la pobreza, la censura, la incultura, la falta de tolerancia, a pesar de tanta pena, la poesía nos salva. Gracias Luis. A. VILLEGA
ResponderEliminarGracias, Antonio. Y gracias, también, a tus bellas creaciones poéticas.
EliminarQue maestría, Luís, a la hora de poner orden a la palabra, y además alfabético. Todo un rompecabezas lírico, con ritmo. Jugando con combinaciones poco usuales, consigues crear un poema original, lleno de verdades, y además agradable al oído. Todo un ejemplo de ingenio👏👏👏👏👏👏👏👏
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