miércoles, 26 de enero de 2022

Recital d'hivern. Pedro Chuecos y Pepe Hernández


 

PALABRAS PARA JULIA

José Agustín Goytisolo

Tú no puedes volver atrás
porque la vida ya te empuja
como un aullido interminable.

Hija mía es mejor vivir
con la alegría de los hombres
que llorar ante el muro ciego.

Te sentirás acorralada
te sentirás perdida o sola
tal vez querrás no haber nacido.

Yo sé muy bien que te dirán
que la vida no tiene objeto
que es un asunto desgraciado.

Entonces siempre acuérdate
de lo que un día yo escribí
pensando en ti como ahora pienso.

La vida es bella, ya verás
como a pesar de los pesares
tendrás amigos, tendrás amor.

Un hombre solo, una mujer
así tomados, de uno en uno
son como polvo, no son nada.

Pero yo cuando te hablo a ti
cuando te escribo estas palabras
pienso también en otra gente.

Tu destino está en los demás
tu futuro es tu propia vida
tu dignidad es la de todos.

Otros esperan que resistas
que les ayude tu alegría
tu canción entre sus canciones.

Entonces siempre acuérdate
de lo que un día yo escribí
pensando en ti
como ahora pienso.

Nunca te entregues ni te apartes
junto al camino, nunca digas
no puedo más y aquí me quedo.

La vida es bella, tú verás
como a pesar de los pesares
tendrás amor, tendrás amigos.

Por lo demás no hay elección
y este mundo tal como es
será todo tu patrimonio.

Perdóname no sé decirte
nada más pero tú comprende
que yo aún estoy en el camino.

Y siempre siempre acuérdate
de lo que un día yo escribí
pensando en ti como ahora pienso.



Arreglos y música: Paco Ibáñez.
Interpretan: Pepe Hernández (Voz y guitarra)
Pedro Chuecos (Voz)

lunes, 24 de enero de 2022

Recital d'hivern. JESÚS PICO

 



         LOS NOMBRES DEL AGUA

 

Posesión de tu nombre,

sola que tú permites,

felicidad, alma sin cuerpo.                                                                                                                    

PEDRO SALINAS


1

Tiene nombres el agua que esperan nuestros besos.

Tiene nombres el agua que navegan los versos.

Tiene nombres el agua que habitan los poetas.

Tiene nombres el agua que sustentan tus piernas.

Son nombres que levantan en las noches de sexo

mareas y galernas, eternas un momento.

Son nombres en los mapas del aire y de la ausencia

y de lentos recuerdos en los labios de arena.

Nombres que repican en las bocas de bronce.

Nombres para volver como una canción de entonces.

 

2

En cada nombre de agua vive un poeta.

El agua es un poema firmado con un nombre

distinto de la dicha, del amor que hoy se llama

como a ti te pusieron, como yo te llamo.

Tu nombre es como un río y tu cuerpo es su cauce.

Cuando dicen tu nombre saben a mar mis labios.

Tiene nombres el agua que va susurrando el viento.

Tiene nombres el agua como el nombre tuyo

desnudos y dormidos en la piel de la noche.

Para navegar en ellos y penetrar al fondo

del silencio y la vida, tiene nombres el agua.

 

3

Nombres como cascadas sonoras,

como los ríos germinales,

rápidos y plácidos, así como un sueño,

 como un sobresaltado despertar.

Nombres antiguos que se pierden

en la noche de los besos y el frío,

nombres de lumbre y gemido,

nombres instalados en los huesos,

en la médula del alma.

Nombres para decirte en la noche del agua

todo el amor que guardas

en las frescas vasijas de tus pechos.

 

4

Los nombres que besa el viento,

caricia amarilla en los mapas

dorados de tu cintura,

los nombres que el viento mece

en el  mar de tus cabellos,

son los nombres que te digo

cuando la brisa se quiebra

en la esquina de tu talle

donde mi mano reposa

ciega de remarte tanto.

 

5

Los nombres, siempre los nombres.

Los ignoraremos siempre

como sumergidas islas

y amadas que no tuvieron poeta que las cantara.

Los nombres, siempre los nombres.

Te los diré al oído para que nadie los sepa.

Del agua siempre los nombres

y de mis labios la sed. 


Jesús Pico 

Del libro "Los nombres del agua", Premio Amantes de Teruel, 2020 






sábado, 22 de enero de 2022

Recital d'hivern. ARACELI MORETÓ

 


 

FLORES EN DICIEMBRE

                                                                 

Olía a azahar el altar entero.

La ermita lucía sus mejores galas.

No fui a catequesis con mis compañeros.

El cura nos dijo que no hacía falta.

 

Yo era la novia en aquellos momentos,

o una bebé recién bautizada,

o quizá el muerto en un triste entierro.

La protagonista de aquella mañana.

 

Me sentí feliz, de eso si me acuerdo.

Pendientes de mí todas las miradas.

Pulsera de plata, diadema blanca,

vestido sencillo, encaje en las mangas.

 

El cura nos dijo que hay que ser bueno,

mi hermano reía mientras escuchaba,

su media sonrisa, cara de travieso,

recuerdo a veces, evocando su  alma.

 

Y tengo aún presente una voz que de lejos

con fuerza  pedía a la Virgen Blanca

que mi mundo fuera un poco más bello,

sin tantas angustias, sin negras mañanas.

 

Después, pasado el dulce momento,

la ermita quedó allá en la montaña.

Su estampa lucía entre los silencios

          de pinos, madroños, encinas y escarcha.         

Araceli Moretó



viernes, 21 de enero de 2022

Recital d'hivern. MARÍA NARANJO

 



UNA NAVIDAD DIFERENTE

 

Mirando por mi ventana

he podido comprobar

cómo el tiempo se detiene

para dejarse abrazar.

 

El murmullo se contiene

y comienzo a recordar.

Tengo que cerrar los ojos          

para poderte escuchar.

 

Es tu voz que me acaricia,

nunca la podré olvidar.

 

¡Vistamos el árbol mamá!

Saca ya las luces, las cintas,

las bolitas de cristal,

que casi ya es navidad.

 

Yo lo vestiré precioso,

verás qué bonito está.

Estrenaré mi vestido

y en paquetes muy pequeños

esconderé regalitos.

 

Saca ya las luces mamá,

que ya es casi navidad,

que la gente va corriendo

con los regalos a cuestas

y las luces en las calles

están ya casi dispuestas.


¡Ay! Qué alegría, están

debajo de mi ventana,

son campanitas:

azules, verdes y blancas.

¡Ay! Qué alegría,

cómo me gusta mirarlas.


María Naranjo




martes, 18 de enero de 2022

Recital d'hivern. LUIS ARRANZ

 





TIERRA POLICROMADA

  

¡Blanca en invierno… Castilla!                                    

El verde primaveral

te hace –en verano- amarilla

y te da un ocre otoñal.

 

Colores que te hacen bella,

a ti… ¡Tierra agreste y recia!

Castilla… ¡Hermosa doncella

para quien te ama y te aprecia!

 

Aunque el clima esté cambiando

y tu paisaje se altera,

el vigor te va forjando

y el impulso te empodera.

 

Hay que salir a los ríos,

a los prados, a los montes…

Visitar los caseríos,

traspasar tus horizontes…

 

¡Oh! Castillas Nueva y Vieja

Mesetas de Tajo y Duero,

de tierra parda y bermeja,

de hombre curtido y severo.

 

¡De mies que, a tu piel, se aferra!

Con la garra del verano

y el deshielo de la Sierra,

cubres de espiga el secano.

 

Cuna de fuertes heladas;

de ardua inclemencia invernal;

de sequías y riadas

que hacen de la huerta, erial.

 

De tormentas estridentes

y asoladores  granizos.

De amaneceres silentes

y atardeceres rojizos.

 

De pastores, y de ovejas,

por veredas contrahechas;

de casas nuevas y viejas;

de labores y cosechas.

 

De altozanos y llanuras;

de valles y serranías;

de monjas, frailes y curas…

de misas todos los días.

 

En cada casa, un dolor;

en cada pueblo, una herida;

en cada hombre, un valor

que le honre en justa medida.

 

¡Castilla contemplativa,

donde la vida se acaba!

¡Tan generosa y activa…!

¡No seas jamás esclava

de gente torpe y lesiva!


Luis Arranz



domingo, 16 de enero de 2022

Recital d'hivern. GRACIA ESPINO

 


              

NEBLINA

 

Voy pasando por este mundo extraño

pensado siempre en ti, más no te encuentro.

Triste mirada tenía la luna

me acompañaba en mi azaroso empeño

con palabras vestidas, yo, desnuda,

¡Ay, que noches de amor llevo por dentro!

Es como estar sin Dios en mi agonía.

A veces respiro nostalgia, ¿sabes?

La disfrazo en los puentes de mis labios

que desprenden neblinas  y no te veo.

Colgados guardo el sabor de tus besos

ya están amargos como mi dolor.

Carcoma es mi carne, temblando mi alma

marcan mis horas puñales de sangre,

uno mis manos, intento atraparte.

Tu eres el viento violador de llamas

entre ola y espuma embraveces al mar

y yo ese barco  que va a la deriva.

Ni tierra, ni mar, ni aire me responden.

Ya los pies de la noche silenciosos

 se aproximan, parece que estoy sola,

¿acaso sí? ¡No! La gloria eres tú que

zambullido en mí, no alcanzo esa orilla,

lado, herido y doliente que me espera.   


Gracia Espino


                                             

jueves, 13 de enero de 2022

Recital d'hivern. FRANCISCO LIRA

 



LLORÉ


Lloré... lloré a solas,

acompañando mis lágrimas,

con la rabia y la ira de mi soledad.

Huérfana y sola...

Lloré... lloré con penas de impotencia

nublándome el corazón,

con latidos de desaliento.

Lloré... lloré como un niño,

desconsolado y tierno,

que no entiende del mal...

Lloré por los muertos

y por los vivos que lloran a sus muertos,

vivos en la memoria y en el corazón.

Lloré hasta quedarme sin lágrimas,

y mi llanto se hizo verso...

y mi verso se hizo alma,

hasta llegar al universo

que gravitan las palabras...

y me quedé sin aliento

esperando a las musas...

en lo hondo del silencio.

Lloré... lloré todas mis lágrimas

hasta quedarme dormido

y mojar mis sábanas

con mi llanto y mis quejidos...

Lloré por ti, que aún no te conozco.

Lloré por él, y por ella, y por todos...

Un conjunto de almas perdidas en la selva

de una sociedad vacía y vacua,

sin criterio ni orden,

sin aliento ni  pulso, y sin rumbo.

Lloré por un futuro

incierto y descorazonador,

que te hiela los sentidos.

Lloré hasta quedarme dormido,

soñando sonrisas y besos...

miradas de inocencia y de bondad:

Paz entre los hombres.

Paz con la naturaleza.

Paz con la tierra y el cielo.

¡Paz, Justicia y Libertad!

Que pena que tan solo fue un sueño...

un sueño roto por la realidad.

Descanse en paz...

 

Francisco Lira  

(Octubre, 2021)           





martes, 11 de enero de 2022

Recital d'hivern. ISIDRE OLLER

 

 

                                                                                                                                                          

      “El silenci és el so de la por i de la foscor”,

va dir la Yoko Ono.

En la foscor de la teva freixura,

amb el soroll esmorteït dels teus sucs gàstrics,

has paït el vi que tan amorosament havies conreat.

Quina contribució ha tingut aquest vi a la teva por?

Quina contribució a la foscor dels teus fets?


Quina contribució a la teva mortalitat infinita?

No tot, per sort, és silenci o soroll inútils,

has cregut tocar la felicitat en moments feliços,

has somrigut al marge dels límits

i no ho podràs explicar ni repetir-ho d’igual.

Hi ha màgies que només tu assaboriràs...

                               

Hi ha un plaer intel·lectual,

un sentiment en què t’has fos

en el vi que intentes paladejar.

A fora, un univers espectacular.      


Isidre Oller



domingo, 9 de enero de 2022

Recital d'hivern. ENCARNA JIMÉNEZ




HIZO UN CRUJIDO

 

Como un polizón, volviste

a colarte por mis sueños;

y… al despertar… en mi boca

un sabor agrio me encuentro.

 

Hizo un crujido mi empeño.

Y se rompió en mil pedazos,

cuando se fue la ilusión

de despertar en los campos.

 

¿Cómo controlar los sueños?

Es un empeño imposible.

¿Cómo decir al cerebro

que no tiene vía libre?

 

Como una tela de araña

el viento se vino en contra.

Las ilusiones vencidas

se perdieron en las sombras.

 

Extremadura es la tierra

donde un día brilló el sol,

en los ojos de una niña,

deslumbrados de ilusión.

 

Un día, bajo una encina,

le daré paso al recuerdo

de tiempos de adolescencia…

¡Dulces como caramelos!


Encarna Jiménez



UN CABALLO SIN RECELOS de Encarna Jiménez de la Cruz. Revista poètica 1.26

  Cuando cabalgo, a la grupa, de un caballo sin recelos, por una playa de seda, le doy al agua mis versos. Son palabras engarzadas...