Me quedé impregnado de tus versos...
sentí por mis venas tu compromiso,
me dejé llevar por tus recuerdos
y encontré de repente tus lamentos.
De tanta impotencia vivida
y de tantos sufrimientos,
el amor y la guerra de tu vida
la pasión de tus sentimientos...
y el martirio de tus heridas
retumbando entre los muertos.
Me vi en una trinchera
esperando la mañana,
sentado sobre los muertos
que antes, vivían España.
Voces del pueblo, me llaman,
y me escriben algunas cartas
recordándote en una cárcel
repleta de telarañas...
sentí tus pulmones podridos,
a causa de tanta infamia,
y tus últimos deseos perdidos
por unos versos, te enjaulan..
Tengo el corazón herido
de tanto latir sin pausa,
tu vida fue un ejemplo
tus ideas, fueron tu causa...
Tus sentimientos una bandera
ondeada con tu palabra.
Miguel Hernández, poeta,
de nobleza y casta brava
tus poemas fueron flechas
clavadas en nuestras almas...
Hoy seguimos en la brecha
recordándote con añoranza
Miguel Hernández, poeta,
la poesía te reclama,
con tres heridas sujetas
a tus versos y tus palabras,
de tantas poesías repletas
de amor y de esperanzas...
Miguel Hernández, poeta,
sigue alumbrando, mañanas,
que las tardes en las cunetas
recitan las dos Españas.
Francisco Lira. (Noviembre, 2023)
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Un poema que nos aproxima a nuestro recordado Hernandez muy hacértelo. Felicidades amigo.
ResponderEliminarAcertado
ResponderEliminarHace mucho tiempo que quería escribir un poema a Miguel Hernández, y el recital de Can Llong me inspiró de su duende, y al final creo que me ha salido un poema muy digno. Gracias Auri.
ResponderEliminarDecir digno es poco Francisco. Es un hermoso poema, digno de un gran poeta. En unos tiempos además que para sentir un poco de paz, hemos de cerrar la tele y la radio. Porque ya no pueden nuestros ojos con tanto dolor, con tanta barbarie. Vivimos el horror a diario, los niños nos rompen el alma.
ResponderEliminarMiguel Hernández, nos deja el dolor escrito envuelto en la belleza del arte.
Enhorabuena, por revivir una vez más la grandeza de nuestro querido poeta
Muchísimas gracias María! Siempre me cautivan tus comentarios.
ResponderEliminarUn paseo por tus versos con matices de Miguel Hernández, mezclados con habilidad y destreza. Reflejos de su vida, plasmados con la elegancia que te caracteriza. He visto a Miguel Hernández, paseando entre tus estrofas, entre tus versos. Consigues, en este poema que el lector se sienta mas cerca de quien fue, y seguirá siendo, a través de nuestras memorias.
ResponderEliminarGracias Araceli. Este poema lo empecé a escribir, al día siguiente del recital de an Llong, pero lo dejé inacabado... y hace un par de semanas, lo acabé, y me sentí, muy orgulloso y contento, porque como le dije a Auri, hacía muchísimo tiempo que quería dedicarle un poema... Aquel recital, me transportó el duende y la inspiración... Disfruté tanto!!!
ResponderEliminarFue muy emotivo. Es verdad. La gente nos felicitó encarecidamente
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