miércoles, 2 de junio de 2021

Recital de mayo. Pepe Hernández

 

LA ROMERÍA

¡Ay, qué blanca la triste casada!
¡Ay, cómo se queja entre las ramas!
Amapola y clavel será luego
cuando el macho despliegue su capa.

Si tú vienes a la romería
a pedir que tu vientre se abra,
no te pongas un velo de luto
sino dulce camisa de holanda.


Vete sola detrás de los muros
donde están las higueras cerradas
y soporta mi cuerpo de tierra
hasta el blanco gemido del alba.


¡Ay, cómo relumbra!
¡Ay, cómo relumbraba!


Federico García Lorca
Arreglos de Paco Ibáñez
Interpreta Pepe Hernández
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Texto original


YERMA.
Señor, que florezca la rosa,
no me la dejéis en sombra.

MUJER 2ª.
Sobre su carne marchita
florezca la rosa amarilla.

YERMA.
Y en el vientre de tus siervas
la llama oscura de tierra.

CORO DE MUJERES.
Señor, que florezca la rosa,
no me la dejéis en sombra.

YERMA.
El cielo tiene jardines
con rosales de alegría,
entre rosal y rosal
la rosa de maravilla.
Rayo de aurora parece,
y un arcángel la vigila,
las alas como tormentas,
los ojos como agonía.
Alrededor de sus hojas
arroyos de leche tibia
juegan y mojan la cara
de las estrellas tranquilas.
Señor, abre tu rosal
sobre mi carne marchita.
(Se levantan.)

MUJER 2ª.
Señor, calma con tu mano
las ascuas de su mejilla.

YERMA.
Escucha a la penitente
de tu santa romería.
Abre tu rosa en mi carne
aunque tenga mil espinas.

CORO.
Señor, que florezca la rosa,
no me la dejéis en sombra.

YERMA.
Sobre mi carne marchita,
la rosa de maravilla.

NIÑOS.
¡El demonio y su mujer! ¡El demonio y su mujer!

HEMBRA.
En el río de la sierra
la esposa triste se bañaba.
Por el cuerpo le subían
los caracoles del agua.
La arena de las orillas
y el aire de la mañana
le daban fuego a su risa
y temblor a sus espaldas.
¡Ay, qué desnuda estaba
la doncella en el agua!

NIÑO.
¡Ay, cómo se quejaba!

HOMBRE 1°.
¡Ay, marchita de amores
con el viento y el agua!

HOMBRE 2°.
¡Que diga a quién espera!

HOMBRE 1°.
¡Que diga a quién aguarda!

HOMBRE 2°.
¡Ay, con el vientre seco
y la color quebrada!

HEMBRA.
Cuando llegue la noche lo diré,
cuando llegue la noche clara.
Cuando llegue la noche de la romería
rasgaré los volantes de mi enagua.

NIÑO.
Y en seguida vino la noche.
¡Ay, que la noche llegaba!
Mirad qué oscuro se pone
el chorro de la montaña.
(Empiezan a sonar unas guitarras.)

MACHO. (Se levanta y agita el cuerno.)
¡Ay, qué blanca
la triste casada!
¡Ay, cómo se queja entre las ramas!
Amapola y clavel será luego
cuando el macho despliegue su capa.
(Se acerca.)
Si tú vienes a la romería
a pedir que tu vientre se abra,
no te pongas un velo de luto
sino dulce camisa de holanda.
Vete sola detrás de los muros
donde están las higueras cerradas
y soporta mi cuerpo de tierra
hasta el blanco gemido del alba.
¡Ay, cómo relumbra!
¡Ay, cómo relumbra,
ay, cómo se cimbrea la casada!

HEMBRA.
Ay, que el amor le pone
coronas y guirnaldas,
y dardos de oro vivo
en su pecho se clavan.

MACHO.
Siete veces gemía,
nueve se levantaba,
quince veces juntaron
jazmines con naranjas.

HOMBRE 3°.
¡Dale ya con el cuerno!

HOMBRE 2°.
¡Con la rosa y la danza!

HOMBRE 1°.
¡Ay, cómo se cimbrea la casada!

MACHO.
En esta romería
el varón siempre manda.
Los maridos son toros.
El varón siempre manda.
¡Dale ya con la rama!
Y las romeras flores
para aquel que las gana.

NIÑO.
¡Dale ya con el aire!

HOMBRE 2°.
¡Dale ya con la rama!

MACHO.
¡Venid a ver la lumbre
de la que se bañaba!

HOMBRE 1°.
Como junco se curva.

HEMBRA.
Y como flor se cansa.

HOMBRES.
¡Que se aparten Las niñas!

MACHO.
Que se queme la danza
y el cuerpo reluciente
de la linda casada.
(Se van bailando con son de palmas y sonrisas. Cantan.)
El cielo tiene jardines
con rosales de alegría,
entre rosal y rosal
la rosa de maravilla.

Federico García Lorca
Fragmento de «Yerma», 1934
Acto tercero
Cuadro segundo



1 comentario:

  1. Es un lujo contar con Pepe Hernández y su guitarra, cada día que pasa lo hace mejor. No solo nos acompaña, que también nos trae unas canciones que amenizan la tarde, que nos emocionan. Trabaja los textos y se esmera en darles una calidad que se aprecia. Tu participación es siempre muy especial.
    Gracias por ser, por acompañarnos.

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